¿Qué aprendí hoy? Esta es una pregunta que me gusta hacerme cada noche y tal vez es parte del legado de mi madre: “Nunca te acostarás sin saber una cosa más”. A través de contrastes de emociones, pensamientos y percepciones intuitivas te invito a sacar la riqueza que hay en tus vivencias. Desde una mirada de no juzgarse a uno mismo y sin dar nada por sentado, te invito a que te mires con amor y curiosidad, y te cuestiones los porqués y para qué de cómo actúas, cómo piensas o cómo sientes. Comparto mis aprendizajes y cómo aprendo de mis experiencias, desde un enfoque de coaching, apuntando la mirada hacia los encuentros y a la relación con uno mismo. Desde ahí te llevo a cuestionarte en qué momentos puedes perderte a ti mismo. Celebrar, compartir, crecer, sumar y enamorarse son algunas de las cosas que podrás encontrar. También silencios, amenazas y abandono. Te ofrezco momentos de autoconocimiento, de comprensión, de inspiración, de sentimientos encontrados y confrontados. Para acompañarte y descubrirte entre amar y querer, salvar y cuidar, avanzar y crecer, gustarte y no gustarte…. Y por qué no, entre lo humano y lo divino. ¡Qué labor más titánica intentar ser una persona humana y divina a la vez! ¿Quién está a la altura de un valor ideal divino? Yo soy humana. ¿Y tú?